La CTM fijó postura ante los despidos y advirtió al Gobierno ante dos ejes sensibles para los gremios: las paritarias y la protesta
La Confederación de Trabajadores Municipales, así como sí lo hizo su par bonaerense, anunció una dura postura ante la política implementada por el Gobierno nacional casi desde su asunción, como ser una feroz devaluación del peso y salario argentino y los recientes lanzamientos de la ministra de Seguridad en materia de eliminación de la protesta social.
El encuentro de los gremios municipales fue en la ciudad de Cosquín, provincia de Córdoba, y tuvo un condimento de fastidio muy fuerte por parte de la dirigencia sindical y por eso es que lanzaron en todo el territorio nacional el estado de alerta y movilización.
El Protocolo Antiprotesta anunciado por Patricia Bullrich, de aplicarse tal cual lo anunciara la funcionaria, tuvo la siguiente advertencia: “La dignidad de los trabajadores y las trabajadoras municipales y sus familias no integra ningún componente contable ni financiero, por lo que cualquier política destinada a suprimirla o desconocerla, encontrará la resistencia con unidad y organización de todo el movimiento obrero municipal”.
Los dirigidos por el bonaerense Hernán Doval alertaron además a los ejecutivos municipales de todo el país al avance con las reincorporaciones de los despidos que se sucedieron en muchísimos distritos en Argentina desde el 10 de diciembre, jornada en la que el presidente Milei confirmara el ya famoso “no hay plata”, lo cual provocara pavor en los intendentes y ejecución de la medida más cómoda: recortar trabajadores.
Salarios
La apertura de las paritarias resulta por estas épocas un condimento esencial en la vida de los habitantes de cada rincón argentino y la CTM insto a los distritos a ejecutar el derecho de negociación salarial, al tiempo que convocó casi que de manera urgente al llamado del Consejo Nacional de empleo municipal.
