El SOEME de Esquel comenzó una retención de tareas por tiempo indeterminado por reclamos salariales. Los apuntados: el intendente Matías Pacceta y el gobernador, Nacho Torres
Desde hace veinte días, los trabajadores municipales de Esquel están inmersos en un conflicto salarial que alcanzó un nuevo punto crítico este miércoles a las 0, cuando el SOME inició una retención de servicios por tiempo indefinido. Los trabajadores reclaman una mejora salarial necesaria para enfrentar la inflación y el alto costo de vida de la zona patagónica.
El conflicto comenzó a principios de mes cuando los trabajadores municipales demandaron un aumento salarial del 20% a partir de mayo, además del 15% ya otorgado por decreto municipal. El salario mínimo de los trabajadores municipales es de 380.000 pesos, con un promedio de 500.000 pesos, cifras que han quedado desfasadas ante la inflación y la devaluación constante de la moneda.
La situación se complicó cuando la Secretaría de Trabajo intervino, dictando la conciliación obligatoria y solicitando certificaciones de autoridades al gremio, un movimiento peculiar, ya que la misma Secretaría aún no ha otorgado la certificación luego de las elecciones internas del SOEME en diciembre de 2023, donde Antonio Osorio fue ratificado como secretario general.
Matías Pacceta, intendente de Esquel, también protagonista del conflicto, se encuentra sometido a las restricciones impuestas por el gobernador de Chubut, Nacho Torres, quien insta a los intendentes a mantener los incrementos salariales por debajo del 30%, en un esfuerzo por controlar el gasto público en medio de una situación económica delicada para la provincia.
Osorio, además delegado de la CGT Regional Esquel, comenzó a coordinar acciones de presión hacia el Ejecutivo muncipal. El gremio cuenta con el respaldo de la Confederación de Trabajadores Municipales, liderada por Hernán Doval.
Por estos días, el conflicto municipal continuará con la retención de tareas, con guardias minimas aunque con una sucesión de hechos que lleva a los municipales reclamar por la permanente caída del poder adquisitivo, mas en zonas patagónicas, en donde el costo de vida es siempre superior al de otras regiones.
