Llaryora prepara la paritaria municipal con Doble Jornada
Una resolución creó los protocolos administrativos necesarios para el cambio de horario permanente de los agentes municipales. En la previa de la paritaria el municipio suma presión sobre el Suoem y deja trascender dos noticias: la Tarjeta Activa y… ¿la posible implementación de la jornada doble?
En las últimas horas empezó a circular en los grupos del Suoem un archivo que contiene una serie de resoluciones emanadas de la Secretaría General y la Subsecretaría de Capital Humano, en las cuales se crean los protocolos administrativos necesarios para que los titulares de cada secretaría puedan solicitar a la cartera que comanda Verónica Bruera el cambio de horario permanente de los empleados que revistan en reparticiones sujetas a su jurisdicción.
En palabras más sencillas, la resolución firmada por la Subsecretaría de Capital Humano reglamenta la resolución previamente dictada por la Secretaría General que habilitó la doble jornada municipal, allá por mayo de 2020.
Esta nueva regulación tiene todos los condimentos para caer como una bomba dentro del gremio, ya que entre sus antecedentes también alude a la famosa ordenanza 13.033, que redujo la jornada y el salario de los municipales.
La misma norma prevé además nuevos mecanismos de control para los agentes que por diferentes circunstancias lleguen tarde a sus lugares de trabajo e incluso habilita la posibilidad de que los municipales sean comisionados a cumplir sus tareas fuera de su horario habitual de prestación de servicios, en coherencia por los prescripto por la resolución emanada de la Secretaría General que le sirve de antecedente, que habla de la facultad de los secretarios para “…establecer modalidades u horarios especiales, teniendo en cuenta la naturaleza de los servicios que en cada caso se prestan”.
La nueva normativa representa una gran herramienta para potenciar a la gestión, ya que permitiría que las distintas reparticiones del municipio funcionen durante doce horas diarias (de 8 a 20 horas), duplicando la disponibilidad horaria en la que los vecinos pueden llevar adelante sus gestiones frente a las distintas oficinas de la Municipalidad y los Centros de Participación Comunal, aumentando la disponibilidad de recursos humanos para desenvolver las acciones de gobierno y disminuyendo a su mínima expresión la concesión de costosísimas “horas extra”, hoy suplantadas en la práctica por “módulos no remunerativos”.
Pero además, sería de especial utilidad para llevar adelante algunos programas de gobierno, como por ejemplo los cambios en fiscalización que llegarían junto a las Habilitaciones Online, que demandarán una alta rotación horaria entre los inspectores asignados a cada sector de la ciudad.
Por otro lado, es imposible soslayar que la reglamentación de los mecanismos necesarios para implementar los cambios de horario llega en las vísperas de una nueva paritaria con el Suoem, y después de casi un año de haber dejado congelada la promesa de la Doble Jornada Municipal. Resulta claro que aquella iniciativa quedó congelada por un acuerdo con el Suoem que ahora parece volver a entrar en tensión.
Ahora bien, esta nueva reglamentación no es la única preocupación que el sindicato ha sumado en las últimas semanas. Allí está también el proyecto de la Tarjeta Activa, con la que funcionarios y servidores urbanos empezarán a percibir parte de sus salarios. Es harto probable que la misma suerte corran los empleados de planta.
En la previa de la paritaria, el Ejecutivo acumula presión sobre el sindicato, prepara la negociación construyéndose una atalaya desde la cual entrar en las tratativas, y mina un campo en el que el Suoem, al llegar, algo tendrá que ceder.