Los municipales empiezan a discutir salarios y quieren más que la cláusula gatillo
Este miércoles, a las 15, está convocada la reunión para la paritaria de los trabajadores municipales. Horas antes se reunirán los representantes paritarios de los gobiernos locales que de esa manera comenzarán a diagramar una estrategia de negociación en un momento económico y financiero muy complicado.
Pero los trabajadores nucleados en la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram) de Santa Fe también vienen manteniendo encuentros donde definieron algunos puntos a tratar con los intendentes. En diálogo con UNO Santa Fe el secretario General de Festram, Claudio Leoni, manifestó que lo primero que se va a plantear es que «se necesita un clima de paz social» para negociar.
Claro está que la discusión salarial será el tema central de la paritaria y en ese punto Leoni dijo que este año quieren que el salario le gane a la inflación y que con ese objetivo la cláusula gatillo no alcanza porque siembre va detrás del aumento de los precios. Además, dijo que son inaceptables aumentos con sumas no remunerativas porque «ese es un esquema que desfinancia a las obras sociales y a las cajas de jubilaciones» de los Estados locales. También pondrán sobre la mesa la actualización de las asignaciones familiares «que tienen un desfasaje del 500 por ciento respecto de lo que paga Nación».
Respecto a los despidos, Leoni dijo que «hay localidades que están produciendo despidos de trabajadores precarizados» y que lo que se pretende, por lo menos, es «mantener los puestos de trabajo hasta que se dé una solución definitiva» a ese tipo de contrataciones. «También tenemos el caso de Ceres donde tenemos despidos de trabajadores de planta permanente. En este esquema de tensión social es muy difícil discutir una política salarial», advirtió.
En tanto, al ser consultado sobre cuántos son los trabajadores despedidos, el sindicalista aclaró que en Ceres ya se terminó la conciliación obligatoria, donde no se cerró el acuerdo, y que ahí «hay un registro de 44 trabajadores despedidos; en Pozo Borrado son seis o siete. Mientras que se lograron reincorporar a todos los que habían sido despedidos en Maciel», detalló y aseguró que es una situación que se repite cada vez que hay cambio de autoridades.
«Vamos a pedir el mantenimiento de los puestos de trabajo como espacio para poder discutir otros temas, fundamentalmente salarios», dijo Leoni y agregó: «Pero otro de los temas que vamos a exigir es que definitivamente se actualicen las asignaciones familiares. Ese es un problema serio que tenemos hace muchos años donde la provincia de Santa Fe tiene un desfasaje de más del 500 por ciento respecto a lo que paga la Nación. Desde el gobierno de (Hermes) Binner que no hay actualización».
En ese ítem los trabajadores municipales están «atados» a la ley provincial. Pero el atraso es tan grande que el secretario General de la Festram advirtió que «si no hay una salida en conjunto para el sector público, como la responsabilidad inicial de pagar las asignaciones familiares la tienen las municipalidades, se van a promover acciones judiciales para la actualización».
La política salarial 2020
En este punto, Leoni dijo que en los primeros encuentros Festram va a exponer lo que ocurre en los municipios y comunas y lo que va a ocurrir en materia económica y financiera. En ese sentido, advirtió que la mayoría de los trabajadores municipales dependen de las cajas de jubilación municipales, por lo tanto «cualquier aumento de cifras no remunerativas o de montos fijos, que son inaceptables si no alcanzan a los trabajadores pasivos, son procesos de desfinanciamiento de las obras sociales y de las cajas de jubilaciones que las administramos directamente en los Estados locales».
«En lo salarial vamos a insistir con que tenemos que ser superadores a la cláusula gatillo. Nuestra expectativa es convenir acuerdos salariales por encima de la inflación y no por detrás como es la cláusula gatillo», remarcó.
Al ser preguntado sobre si los municipales van a plantear que no quieren la cláusula gatillo, Leoni aclaró: «Nosotros hasta el 2015 teníamos acuerdos salariales que superaban en varios puntos a la inflación. Después la cláusula gatillo lo que hizo fue hacer que perdamos menos de lo que perdía el resto. Pero la cláusula gatillo viene por detrás del proceso inflacionario y, además, el salario pierde poder adquisitivo porque los alimentos y el tema tarifario son los que más impactan en el salario y la cláusula gatillo toma el IPC (Índice de Precios al Consumidor) general. Nosotros no podemos considerar el impacto de las prepagas en el IPC porque nosotros tenemos obra social; o el tema del esparcimiento, que van haciendo reducir el impacto del índice. Nosotros tenemos puestos los ojos en el tema alimentos, vestimenta, canasta escolar, que son los que lamentablemente son los que aumentaron y son los que siguen aumentando».
Luego Leoni remarcó que el proceso inflacionario que vivió la Argentina en los últimos años no fue culpa de los trabajadores y reconoció que con una inflación, como la del año pasado, del 53 por ciento «la cláusula gatillo está tomada, más que como ir por detrás de la inflación, como un alivio para sostener el poder adquisitivo. De eso no hay ninguna duda».
«Además –continuó–, cuando uno se acostumbra a tener aumentos todos los meses, salir de ese esquema genera un cambio muy importante. Antes si se estimaba una inflación del 25 por ciento, se acordaba un aumento escalonado y se llegaba a percibir el aumento antes de que se ejecutara la inflación. Ese es el punto. Nosotros queremos que nos ofrezcan un porcentaje que nos permita tener el salario dos o tres meses por arriba de la inflación, porque eso es lo que te permite defender el poder adquisitivo. Si el salario va detrás de la inflación, sea con baja o con hiperinflación, siempre va detrás».
—¿Cómo ve el escenario para este año donde hay consultoras privadas que proyectan un 42 por ciento de inflación?—No sé si pensarlo en esos términos. Nosotros tenemos convenios con consultoras que nos están dando entre el 36 y el 40 por ciento. Sobre esos esquemas vamos a tener que estar pensando y, si no llegamos con esos montos, también habrá que pensar en un mecanismo de actualización.
—¿Cómo analiza la oferta que la provincia le hizo a los docentes?
—Como los docentes, con un paro. Eso ya lo pensaron los docentes. Si ellos decidieron rechazarla es porque no están de acuerdo. No veo por qué vamos a estar de acuerdo nosotros que no somos docentes.
—Pero muchas veces los intendentes toman como parámetro la oferta que la provincia les hace a los docentes y a los estatales para hacer un ofrecimiento similar.
—No es tan así. Nosotros tenemos la cláusula gatillo completa todo el año, no como al sector público al que se le cortó en noviembre. El índice inflacionario de diciembre lo cobramos con salario de enero. Es mucha la diferencia. Son dos meses de cuatro y pico por ciento, casi un 10 por ciento de diferencia. Nosotros sabemos que están en discusión recursos para los municipios con la ley (de Estado de Necesidad Pública, que se discute en Legislatura). No queremos ser parte de la discusión, pero evidentemente que hayan designado a la mayoría de los intendentes paritarios del Frente Progresista tendrá algo que ver con el tema legislativo. Pero ese es un tema que nosotros no vamos a absorber. Para nosotros la ley es buena, no digo que lo sea para el resto. Pero por lo menos esa ley va a crear un fondo de 3.000 millones que los estamos necesitando para poder avanzar en el pago de salarios que tuvo algunos inconvenientes.
—¿Lo que me está diciendo, Leoni, es que los municipales no quieren quedar rehenes de esa discusión política entre el gobierno y el Frente Progresista?
—No,claro. Pero si sale la ley vamos a ser beneficiados. Los municipios van a ser beneficiados.
—La coyuntura indica que los municipios hoy necesitan una mano de la provincia.
—Exactamente. Y la provincia lo condiciona a un acuerdo que parece que cada vez está más lejos en la Legislatura.